lunes, 29 de junio de 2015

Patapatinos en el taller -- (Duckandducklings at workshop)


                                                 escultura de comuq
                                                 madera de roble
                                                 año  2015
                                                

                      ...una tarde el escultor se encuentra con que la gata de los vecinos ha traído a su taller
    su prole de dos gatucos. Rápidamente las crías se escodieron tras unas maderas junto al banco del
    artesano. La gata gruñía advirtiendo al hombre que no se acercara más de la cuenta y él decidió po-
    nerse a la tarea. Sentose en el banco y cotinuó golpeteando con la azuela y las gubias su proyecto
    de escultura...




        y poco a poco, mientras escuchaban el ruido acompasado o la madre andaba cerca...





                              ... los gatinos comenzaron a asomar con timidez sus cabezas.



   ...rebuscó el artesano en el almacén de la cuadra y encontró un trozo de viga (cási en el olvido)
      tras una década o más guardado entre otras maderas. Pensó que sería de castaño pero al dar
      los primeros azadazos o hachazos, diose cuenta de que la madera era demasiado dura y pesa-
      da. Al fijarse notó en el brillo de la parte labrada unos espejuelos de la madera; !es roble¡,

     acercó la naríz pero no percibió más que un aroma desvanecido.


                    comienza el trasajo con el desbaste, a hacha o azau...
                   ... duro como está, cada golpe lo cuentan los brazos...


               ...y los gatinos se confían, salen y comienzan con sus enredos entreteniendo así de
            cuando en cuando al artesano...


                ...luego llega el turno de las azuelas, bien de madreñeru, bien de carpintero,
                   su cantar más suave o menodo, más alegre...., se extiende por las ccalles...
    

                también para las azuelas resulta duro el trabajo en esta madera pero poco a poco...
               se llega a Lima...


            ...turno de las gubias y el macete, otro cantar distinto...; imposible trabajar a mano sin ayuda
             de los golpes...


         ... aunque más tarde cambiará el número de patinos detrás de la pata, aquí se pueden adivinar
             ya sus cuerpos...



               ..y si una mano se cansa, antes de que se agarrote se cambia el trabajo con la otra...




              ...por fín vemos algo que semeja a la figura que teníamos en mente...




                    y los animalinos continúan enredando y sacándole una sonrisa al artista...




                    ...se decide quitar uno de los patos pequeños con la ``zuela´´ de carrpintero..



              ...como todo, otro día llega a su fín y ya habrá tiempo para seguir con el trabajo. Son las
                jornadas más largas del año pero la luz también se desvanece en el taller. A esta hora la
                gente del pueblo ya hace rato que terminó la cena y muchos se van a dormir.




                        ...uno de los gatinos asoma para despedirse con cara de sueño...



No hay comentarios.:

Publicar un comentario